A partir de la decisión del enrejamiento del Primer Coliseo Bonaerense para evitar los “grafitis y el vandalismo”, las redes sociales se convirtieron en el espacio elegido por vecinos y artistas para rechazar la obra millonaria que durará alrededor de cuatro meses.
Por Bárbara Dibene
En la ciudad de La Plata, la Catedral, la Legislatura, la Suprema Corte y el Colegio Nacional, entre otros edificios públicos, han compartido un destino: ser cercados. Las razones que suelen darse son la necesidad de proteger esos espacios del desmejoramiento de sus fachadas por grafitis, vidrios rotos y la “invasión” de grupos juveniles.
Este año, la firma INSA S.A ganó la licitación de la Fundación del Teatro Argentino y el Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires para enrejar el establecimiento. Según el plan, se dejará un portón abierto en cada esquina durante el día, y durante la noche se cerrarán. También se planificó la limpieza de las paredes, la colocación de bancos y mesas, y la habilitación de un bar o café. Sin embargo, organizaciones como el Colegio de Arquitectos consideraron que la decisión es una “solución fácil”.
No podemos obviar que los patios del Teatro, amplios y grises, cobran vida con cada intervención artística (como la de Almenara), proyecto educativo (como la TAE), movimiento deportivo (como La Plata Rollea), y grupos urbanos como los skaters y grafiteros.
Acciones del reclamo
En Facebook las opiniones en contra del enrejamiento se unieron en el grupo Un cuerpo un barrote, conformado por “trabajadores de la cultura, artistas, vecinos, activistas”, que organizó para este sábado 1 de agosto a las 14 el Festival #TeatroArgentinoSinRejas.
Su objetivo es dar discusión al tema, expresar el impacto negativo de la medida-que marca una distancia hacia una institución pública- , dar a conocer cómo los jóvenes encuentran en el Teatro un espacio de “pertenencia, sociabilidad e identificación”, y empezar a pensar cómo posibilitar la convivencia.
Durante el evento habrá actividades de skate dramático, BiciDanza y La Plata Rollea. También proyecciones, intervenciones (Arte al Ataque y Hagamos lo imposible), un recital de poesía, radio abierta y mesas de debate para proponer soluciones colectivas respecto a la problemática.
Un Muro Pizarra estará disponible para dejar plasmadas las ideas, deseos y memorias que la gente tiene con el Teatro. De la Orilla y Sergio Pángaro cerrarán con su música el evento.
Desde “Un cuerpo un barrote” dejan abierta la invitación a: “Poner el cuerpo, de la manera más literal. Señalar que ese espacio es nuestro, y que nosotros somos con ese espacio. Que un espacio (cualquiera) se convierte en un lugar cuando se habita, cuando se ocupa. Y que somos cuerpos que deseamos estar en ese pedazo de tierra”.
